Si Alemania abandona el Euro

Si Alemania abandona el Euro

¿Qué pasaría si Alemania abandona el Euro?. Si Alemania regresa a su antigua moneda, el marco se revalorizaría frente a la moneda única sobre el 23%, según un estudio de la alemana Fundación Bertelsmann de mayo de 2013. El Euro sufriría una devaluación de sobre el 7% como mínimo. Pero estas estimaciones son en base a cálculos teóricos que no tienen en cuenta la reacción psicológica mundial al abandono de Alemania. Probablemente la conmoción en los mercados mundiales sería de tal calibre que el Euro saltaría por los aires. Todo el sistema financiero del planeta se vería sacudido por tal decisión. 

Casi el 50% de las exportaciones alemanas van dirigidas a países europeos. Y en gran medida, a países del Eurogrupo. Por eso el informe Bertelsmann apunta que Alemania debe seguir en la moneda única incluso si tuviera que perdonar parte de la deuda del dinero prestado a los PIIGS. Incluso con una quita de deuda del 60% a cargo de Alemania le seguiría interesando aguantar el Euro.

Volviendo al marco, con esa moneda revalorizada, las exportaciones alemanas caerían aunque los tipos de interes para financiación de las empresas sería muy bajo. Permaneciendo en el Euro, se presiona para que no se disparen los precios en Alemania.


¿Qué es lo que podría hacer que Alemania tomara tal decisión?.
Si Alemania constatara finalmente que los países PIIGS no tienen auténtico propósito de enmienda en lo respectivo a no gastar más de lo que producen podría abandonar la moneda única. La locomotora alemana no puede tirar de vagones sin ruedas o que han descarrilado.

El problema está en que una parte creciente de alemanes ve con desconfianza los préstamos o ayudas a los países del Sur del Eurogrupo, a los que ven como corruptos e incompetentes. Y eso puede presionar sobre los políticos alemanes para que en un momento dado se dejen llevar por la tentacion de dar una espantada.

No olvidar a Francia: 
No obstante, no sólo es una partida a jugar entre Alemania y los países PIIGS. Está la cuestión de Francia, que tiene un elevado gasto público en 2013, con un gobierno socialista presidido por Hollande, gran proteccionismo laboral en cuestión de salarios y una gran presencia estatal en empresas que deben modernizarse. Si Francia siguiera el rumbo de no encauzar sus desequilibrios, el Euro se encontraría en una difícil situación.

Entre Alemania y Francia se junta casi el 50% del PIB del Eurogrupo. Un fuerte desequilibrio en uno de estos dos países acabaría con la moneda única.


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